miércoles, 7 de mayo de 2014

Día Uno: Decálogo y Aceites esenciales


Decálogo para dejar de ver la Televisión

(y dejar de ser adicta....)


-          1.- Autorizado ver una serie de unos veinte minutos al día, y una película máximo a la semana.



-          2.- Poner carteles en la televisión para no verla.


-          3.- Pensar y planificar labores y actividades nocturnas y cumplirlas.


-          4.- Autorizada la tv con actividades tediosas como plancha, ganchillo y costura, siempre que sean películas o programas que no se vuelvan a retransmitir.


-          5.- Cambiar orden del salón para que el sofá no vaya destinado a ver la tv, y sí al descanso, reunión o relajación.


-          6.- Intentar leer, escuchar la radio o llamar a la familia o amigos para evitar la tentación.


-          7.- Autorizado a grabar películas o programas para la siesta del finde.


-          8.- Autorizado verla siempre que esté enferma.


-          9.- (Vale, no hay más por ahora, pero no se porque me imagino que seré capaz de añadir alguna más)


-          10.- 





Día Uno: Los Aceites de pétalos.



Hoy ha sido un día un tanto largo, entre que por la mañana me he dormido y que al mediodía tuve que salir más tarde para compensar las horas, seguido de que no pude llegar a casa hasta las cuatro de la tarde, he intentado aprovechar el rato todo lo que he podido, aunque reconozco que el decálogo que acabo de publicar, pero que ya llevaba redactado desde ayer por la noche, he intentado cumplirlo. Por ejemplo, ayer por la tarde, cuando baje al patio, recogí dos rosas, la primera de ellas, pese a que ya estaba prácticamente abierta, me parecio que en el rosal lo único que iba a conseguir era que se agotara en el árbol sin que nadie fuera capaz de apreciar su belleza, y la otra, aunque nació un poco torcida, pensé que sería interesante hace aceite de rosas.


Estuve buscando por internet, porque hace mucho tiempo ví que simplemente era necesario recoger sus pétalos, meterlos en un tarro de cristal y ponerlo al sol. A medida que el sol vaya calentando el cristal, el agua se evaporará dejando en el tarro la esencia de los pétalos de las rosas con su aroma tan característico.




Por lo que esta mañana decidí hacer lo mismo, deje la rosa grande y hermosa en su taza, y a continuación retiré los pétalos de la otra rosa, introduciéndolos en un tarro de cristal, y cerrándolo herméticamente, a continuación lo coloqué en la ventana para que los rayos del sol vayan evaporando el agua de los pétalos.







Y pensé, ¿no se podría hacer lo mismo con las lilas? Y como tenía un par de ramilletes en casa del jardín, antes de que el poco tiempo que tienen las lilas en floración desaparezca, pensé que podía prescindir de uno de mis ramilletes para intentarlo, a ver que pasa. Así que repetí el mismo procedimiento que hice con los pétalos de rosa y lo he dejado en otro de los tarritos y lo coloqué igualmente en la ventana. Iré contando los avances que vaya haciendo.





Ya os contaré el día dos...


x.o.

Cheno 

Nota: Los aceites han sido un autentico fracaso... Tenía que haber sido de otra forma, una gran pena... Sobre todo me supuso más fracaso el frasquito de las lilas, cuando lo abrí después de un par de días se habían podrido las flores, con lo que simplemente el olor era una podredumbre de lilas totalmente desastroso. Eso sí, el de rosas no se quedó atrás :(


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